La cronobiología es una rama fascinante de la ciencia biológica que estudia los patrones de vida que gobiernan la vida en todos los niveles de complejidad. Estos ritmos, clasificados según la hora del día en ritmos circadianos, subcircadianos y supracircadianos, son vitales para la vida en la tierra, ya que controlan la sinfonía interior en la que nos quedamos dormidos de vez en cuando mientras nuestro cuerpo se prepara para las actividades diarias.


La raíz de este fenómeno natural es el reloj circadiano, un mecanismo integrado en nuestras células. El reloj se encarga de coordinar y sincronizar muchos procesos internos. El reloj circadiano dirige la repetición sistemática de los eventos orgánicos, asegurando la coherencia. Este patrón preciso está impreso en los genes de cada célula, se desarrolló a lo largo de millones de años de evolución y corresponde a cambios naturales como el día y la noche.


Sin embargo, no subestimes la influencia de la naturaleza. La luz y la oscuridad son grandes transmisores, envían señales importantes al cuerpo y actúan como sincronizadores del reloj natural. Desde el amanecer hasta el anochecer, el sol marca nuestro ritmo circadiano, que determina nuestros niveles de energía a lo largo del día. Pero hoy en día, la luz artificial altera este equilibrio, perturbando nuestros ritmos internos y perjudicando nuestra salud y bienestar.


El centro de este reloj circadiano, que algunos llaman "sistema de tiempo", está ubicado en una pequeña célula del hipotálamo llamada núcleo supraquiasmático (SCN). Sin embargo, la analogía del reloj mecánico puede resultar engañosa porque los relojes naturales son extremadamente flexibles y pueden responder a los cambios naturales con una flexibilidad inesperada.


Además de regular el sueño y los patrones de sueño, el reloj circadiano natural también afecta muchas funciones corporales, desde la regulación hormonal hasta el cerebro. La secreción de melatonina (la hormona que regula el sueño) está muy relacionada con la luz y la oscuridad, por eso nos quedamos dormidos y nos despertamos.


El sueño en sí no es bien conocido ni comprendido del todo, se presenta en diferentes etapas, cada una con sus propias características. Desde el sueño ligero sin movimientos oculares rápidos hasta el sueño REM profundo, nuestros cuerpos y mentes pasan por una asombrosa cascada neuronal que restaura, reorganiza e integra nuestras experiencias diarias.

El sueño REM en particular juega un papel importante en la salud cognitiva y mental, mejorando nuestra memoria, creatividad y capacidad de aprendizaje. Durante estos momentos de ensueño, nuestro cerebro salta el registro de nuestras experiencias, organiza nuestros pensamientos, consolida nuestros recuerdos y se prepara para el día que viene.


Finalmente, la cronobiología nos recuerda nuestra estrecha relación con nuestro entorno, mostrando la relación entre la luz del día, la oscuridad de la noche y el proceso de la vida misma. En un mundo donde la luz artificial es cada vez más poderosa, recordar y respetar los ritmos naturales que rigen nuestras vidas se convierte en la clave para recuperar nuestra esencia perdida y desarrollarla en una vida sana y feliz.


Un reloj es un instrumento que se puede utilizar para medir el tiempo. El reloj circadiano, por otro lado, se considera un reloj que controla temporalmente diversos procesos naturales, manteniendo el sistema para crear cambios con el fin de realizar determinadas tareas y repetirlas periódicamente.


Muchos organismos contienen un reloj circadiano en cada célula. La evolución en la naturaleza opera en un ciclo de 24 horas, utilizando hormonas y neurotransmisores como medio de transmisión celular, lo que determina la elección de la frecuencia de la "señal", el tipo de neuronas y glándulas endocrinas, y el lenguaje químico utilizado. Muchas actividades están asociadas a algún tipo de oscilación rítmica, lo que da como resultado la creación de un reloj circadiano que registra los diferentes pasos de los procesos biológicos, como la liberación de hormonas, la regulación de la temperatura corporal y el trabajo del cuerpo. De él dependen el corazón y el cerebro, entre otros órganos.


El organismo humano puede cambiar periódicamente el llamado "reloj biológico central", que cambia con la hora de la estación luminosa (hora del día) en diferentes épocas del año. Es importante entender que no hay estabilidad en la expresión de los bienes internos, sino cambios de circunstancias.


El reloj circadiano es distinto del ritmo circadiano, aunque están estrechamente relacionados. Los ritmos circadianos son cambios biológicos, neurológicos o de comportamiento que duran unas 24 horas y suelen basarse en ciclos diarios. Trabajan para vincular la evolución de los organismos con los cambios ambientales, de los cuales la luz es uno de los indicadores más poderosos. Un ejemplo de ritmo circadiano relacionado con la luna es el ciclo de sueño-vigilia, en el que se duerme por la noche y se está despierto durante el día. Por tanto, los relojes naturales controlan los ritmos circadianos y la mayor parte de la actividad cerebral implica algún tipo de oscilación.


¿Como puedes prevenir o minimizar sus efectos, reduciendo estados de desincronización circadiana y mejorando el sueño-descanso?

En la organización del trabajo:

 

  • Analizar el contenido del trabajo y tareas que requieren atención, o con una gran carga física.
  • Evaluar horarios y ritmos de trabajo, orientado a restringir las desincronizaciones y la deuda de sueño.
  • Analizar el inicio de la jornada laboral, facilitando la calidad y reduciendo la deuda del sueño de los trabajadores.
  • Concientizar a los trabajadores del turno noche sobre los riesgos asociados con la falta de sueño y descanso.
  • Sensibilizar a los trabajadores sobre estilos de vida saludables, especialmente en relación con el sueño y la alimentación.
  • Realizar vigilancia de la salud de las personas trabajadoras y monitoreo del estado de salud.
  • Elaborar programas de promoción de la salud, calidad de vida laboral y educación en hábitos saludables.
  • Concientizar a los trabajadores de la realización sobre los exámenes periódicos.
  • Mantener actualizada toda información vinculante a la salud de los trabajadores.

 

 

Para las personas trabajadoras:

 

  • Promover buenas prácticas y hábitos saludables.
  • Incentivar a respetar descanso y pausas.
  • Comunicar los turnos con tiempo suficiente para que las personas puedan organizarse.
  • Capacitar sobre la importancia de cuidar el sueño y el descanso.

 

 

El empleo nocturno y por turnos se ha vuelto cada vez más común en todo el mundo, siendo una realidad laboral para millones de personas debido a razones económicas, necesidades de producción o consideraciones sociales. El horario laboral es un aspecto crucial de las condiciones de trabajo que influye directamente en la vida cotidiana, la salud y el bienestar.

Mejorar las condiciones del trabajo por turnos y nocturno implica intervenir en la estructura organizativa. Aunque no existe un diseño de organización de turnos perfecto, es posible establecer criterios de actuación que fomenten y mejoren las Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (CyMAT), respetando los ritmos biológicos de vigilia-sueño y alimentación, así como los ciclos laborales y las relaciones familiares y sociales, con el objetivo de lograr una adaptabilidad adecuada.

 

 

BIBLIOGRAFIAS CITADAS Y CONSULTADAS:

http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/220000-224999/221649/norma.

https://www.eurofound.europa.eu/sites/default/files/ef_ publication/field_ef_document/ef1634en.pdf

https://revistas.unife.edu. pe/index.php/avancesenpsicologia/article/view/349

https://aasm.org/wp-content/ uploads/2023/05/ICSD-3-Text-Revision-SupplementalMaterial.pdf

http:// scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1137- 66272007000200003&lng=es&tlng=es

https:// www.sleepfoundation.org/stages-of-sleep

https://www.argentina.gob.ar/sites/default/ files/guia_factores_y_riesgos_psicosociales_2.pdf

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 




 

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